Modelado de zapato y bordes perfectos

Como cada verano, Cookies in the city cierra por vacaciones de horno. Pero eso no significa que dejemos de aprender nuevas cosas o de hacer alguna que otra tarta. El zapato de la foto es de azúcar, fruto de un taller intensivo en Dulces Ilusiones (Las Tablas, Madrid). Fueron varias horas de modelado, pero mereció la pena. Al menos yo salí muy contenta con mi primer zapato modelado de pasta de goma, también era la primera vez que modelaba con pasta de goma en lugar de con fondant. 



Modelar zapatos es más laborioso de lo que parece. En este caso, hicimos un zapato exprés. El proceso normal de modelado de un zapato puede llevar de 5 a 6 días, pues las piezas tienen que estar bien secas antes de montarlas. 
Trabajamos con bizcocho y ganache de chocolate. Dividimos en tres y montamos las capas, bañándolas con almíbar y rellenando con el ganache. Vero nos enseñó a conseguir unos bordes afilados en el fondant y, aunque lo pellizqué un poco en algún punto, es la tarta de bordes más definidos que he hecho hasta la fecha. 
Mariana nos trajo un repertorio de zapatos para que eligiéramos modelo y nos pusimos manos a la obra. Nos dio las claves para modelar el zapato y nos dirigió hábilmente para evitar el desastre. 

Mariana, Lola, Vero, Manuela y yo

Mis compañeras de taller, Lola y Manuela, hicieron unos zapatos preciosos. Como véis, todos distintos (mira que nos gusta tunearlo todo) y todos parecen de verdad. Envié una foto a mis hermanos y pensaron que me había comprado unos zapatos!

Dejamos Dulces Ilusiones como una zapatería de lujo.

Tarta futbolera

Me costó bastante idear esta tarta, porque el motivo del fútbol no me parece muy versátil a la hora de crear y porque, debo confesarlo, no me gusta el fútbol. Pero a Nico sí que le gusta. Juega al fútbol y su tía Susana quiso darle esta sorpresa. Ella me trajo las botas y el balón de chocolate de Alemania, y las decoraciones de azúcar con balones y jugadores también son suyas. Aquí es difícil encontrar estas cositas que facilitan mucho la decoración de tartas y cupcakes. 
La foto es nefasta, pero no pude hacer nada mejor y prefiero mostrarla y explicar a todos aquellos que también disfrutan haciendo estas tartas, que el fondant se va encogiendo con el paso del tiempo. Al parecer absorbe algo de humedad del buttercream y engrosa ligeramente, haciendo que se separen las piezas si hacéis como yo y recortáis los pentágonos y hexágonos para luego ensamblarlos. La próxima vez que me pidan una tarta futbolera intentaré marcar las figuras en el fondant (blanco) y luego pintar los pentágonos de negro. 
La tarta es una tarta arco iris, como la última que hice para mi sobrino Yago.

Montaje de la tarta arco iris

Aunque para mi gusto resulta una tarta bastante dulce, a los niños les encanta descubrir el interior y miran con ojos incrédulos ese arco iris en su plato.